..."Que cada uno sea hallado fiel"...

"Así pues téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios.

Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel"...(1Corintios 4:1,2).

Querido lector, el Señor cuenta contigo como su administrador y su servidor en este siglo, él sabe que todos los que aún no LE conocen y los que sí , pondrán la mirada sobre lo que haces o dejas de hacer para Él. ¿Estás dispuesto a ser hallado fiel?.

Para ser hallado fiel uno debe de cumplir algunos requisitos básicos:

• Haberle recibido como Señor y Salvador: el primer requisito es tener a Jesús en tu corazón como tu Señor y como tu  Salvador, es importante entender que la palabra Señor indica que Él es quien te dirige a ti y no tú quien le dirijes a Él, eres tú quien debe saber lo que Él pide que hagas y  el que le dicte lo que tiene que hacer por ti cada día como si fuera tu  secretario; si ese fuera el caso, mi querido amigo, Jesucristo no sería tu Señor, puesto que el Señorío indica sumisión voluntaria por amor a Dios.
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• Debes adquirir cada vez más conocimiento de tus funciones, sin que ese conocimiento te envanezca:

"...Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido? (1 Corintios 4:7)

Tener conocimiento de tus funciones, es algo que sólo tú puedes hacer, nadie puede introducirte la información en el cerebro con un chip o un pen-drive, debes buscar ese conocimiento en "LA LÁMPARA" (Salmo 119:105), cuánto más conozcas, más vas a tener la mente de Cristo y vas a adquirir esa sabiduría que te llevará hacia las metas cumplidas con éxito y con  fidelidad. Eso sí, por favor...no pierdas la humildad, cuánto más te dé el Señor, más humilde debes ser en cuanto a carácter y comportamiento, recuerda que tu referencia en todo es Jesús y no ningún predicador famoso o evangelista de éxito, piensa...Jesús era" hiperfamoso", le seguían las multitudes hasta el punto del agobio, aún así siempre fue sencillo y trató a las personas como imporantes, como especiales, aún a las más indignas, como las prostitutas y los ladrones...Confío en que tú harás lo mismo.

• Cumple tu compromiso donde estés trabajando:

Si aún no estás trabajando en nada, te aconsejo que comiences a participar en algún ministerio de tu iglesia local, al mismo tiempo que evangelices a tiempo y fuera de tiempo a todo aquél que se te cruce en el camino; pero en aquéllo que se te ha delegado, SÉ FIEL, te animo a seguir adelante en cada momento, cuando te sientes con esa fuerza que te haría cambiar el universo, así como cuando piensas que mejor que pongan a otro porque tú no vales para eso, recuerda siempre...no te escogió ningún hombre, sino el Señor mismo para su servicio, te limpió, te dio valor y te dio un trabajo para hacer..."el que comenzó la buena obra en ti será fiel en completarla".

• Por último, y no por ello menos importante, guarda tu testimonio:

 Tiene que haber una diferencia visible a todos, entre un creyente y uno que no lo es, si no se nota ninguna diferencia... TIEMBLA porque entonces eres un cristiano camuflado de mundano, tu conducta debe acompañar a tu cambio, si no hay cambio visible, debes comenzar a trabajar en ello, tu forma de hablar, de vestir, de impactar a otros debe ser digna del que te redimió, querido amigo...debes ser hallado fiel. (1 Corintios 4:2).

Ruego al Señor que como Administrador y Siervo del Altísimo, puedas ejercer y trabajar  con fuerza, conocimiento, sabiduría divina y entendimiento de lo correcto e incorrecto, qué el Señor guarde tus pasos del error y tu mente del engaño propio, qué en toda elección optes siempre por lo mejor y qué haya fruto en todo tu trabajo en esta tierra y al presentarte ante el REDENTOR quien pesa los corazones y recompensa a cada uno según su obra.

Pastora Noemí Arteaga.