¿Dónde tienes tu enfoque hoy?, ¿hacia dónde estás mirando?,¿hacia tus problemas?,¿hacia tu futuro?, ¿tal vez hacia tu pasado?...
!Date un descanso!, la Escritura tiene la "clave", tu enfoque debe ser el de Colosenses 3:2 que nos dice: "Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra".
El Señor nos conoce y sabe que podemos estar tan ocupados y preocupados que nos desenfocamos y erramos en nuestras prioridades, podemos centrarnos tanto en lo que vemos como dificultad, que no nos damos cuenta de que hay que mirar hacia arriba..."¿De dónde vendrá mi socorro?", mi socorro viene del Señor que hizo los cielos y la tierra"(Salmo 121). Entonces...¿Por qué miras al problema?, mira al que tiene todas las soluciones, al que está arriba, enfócate en agradarle, en seguirle día a día, en dar testimonio de Él con tus actos y con tu vida, nada escapa a su mano y a su control. Tu vida está bajo control.
No te arrastres por el suelo de los afanes, mantente alerta, Dios puede convertir tu día de estrés en el mejor de todos, sólo debes saber enfocarte, debes entender que detrás de cada nube siempre sigue brillando el sol. ¿Has volado alguna vez en un día nublado?, siempre me ha resultado curioso, que según el avión va alcanzando altura, de repente las nubes o incluso la tormenta quedan por debajo de nuestra vista y el sol brilla sobre un cielo completamente azul y despejado, de la misma manera según alces la mirada hacia la búsqueda del Señor, según te eleves hacia su presencia en oración, te darás cuenta de que las nubes ya no son ni tan grandes ni tan negras, descubrirás que el "Sol de Justicia" siempre brillará para ti. Hoy brilla el sol para ti.
Pastora Noemí Arteaga.
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