domingo, 22 de julio de 2012

Para que me fuesen por... PUEBLO, por FAMA, por ALABANZA y por HONRA...





Dios unió a toda la casa de Judá e Israel con un propósito...Para que le fuesen por :

PUEBLO,FAMA,ALABANZA Y HONRA. (jEREMÍAS 13:11)

¿Acaso crees que Dios no piensa en ti con el mismo propósito?. 

Ciertamente Él anhela y desea que tú, su hij@, que le has conocido más allá de las letras de un libro antiguo, que le conoces más allá de los comentarios y creencias religiosas de una sociedad que se pierde en sus propios argumentos, le seas por pueblo, es decir: que tengas ese sentido de pertenencia que te hace diferente a los demás y por lo que otros "pueblos" te reconocen como extranjero, tú perteneces a otro reino, el Reino de los cielos, eres de un pueblo con un lenguaje distinto, con un acento distinto.
Tú marcas diferencia, eres parte de ese primer propósito :ser su PUEBLO. 

    En segundo término encontramos la palabra "POR  FAMA". Todos deseamos desmarcarnos y saltar a la fama, es algo innato en el ser humano, el individuo quiere destacar; pero en este caso el Señor no busca tu fama, sino que seas tú el que le hagas famoso a Él, no se trata de ti, se trata de Él, es incomparablemente mayor la satisfacción de ver que otros se acercan a Jesucristo, que le reciben en el corazón y que avanzan en nueva vida, por el hecho de que  tú has llevado su fama a todos los lugares donde te mueves.

 La fama del mundo se queda aquí, pero cuando tú haces conocido al Señor, tu fama al hacerlo famoso a Él se extiende por todos los cielos y tu reconocimiento tiene valor eterno, va más allá del tiempo y el espacio que tú y yo conocemos.! Eso sí que es saltar a la fama!.



LA ALABANZA es como una moneda de dos caras diferentes pero con el mismo valor, al mismo tiempo tu moneda te permite por un lado estar en la misma presencia del Altísimo así como por otro lado hace que las tinieblas tengan que huir apresuradas por la unción que rompe todo yugo. 

Por último y no por ello menos importante está la HONRA. 
La honra es tu prestigio, tu crédito, tu credibilidad ante la sociedad y ante ti mis@. Nosotros debemos ser SU prestigio, honrándole en todo tiempo y todo lugar con nuestros actos, conversaciones y comentarios. Los hombres no pueden ver a Dios, pero pueden ver SU reflejo en ti. 

La escritura en el libro de Jeremías nos muestra que el pueblo rechazó ser parte de este propósito, eso dio lugar a lo siguiente:

"Escuchad y oíd; no os envanezcáis, pues Jehová ha hablado.Dad gloria a Jehová Dios vuestro, antes de que haga venir tinieblas, y antes de que vuestros pies tropiecen en montes de oscuridad y esperéis luz, y os la vuelva en sombra de muerte y tinieblas. Mas si no oyereis esto, en secreto llorará mi alma a causa de vuestra soberbia; y llorando amargamente se desharán mis ojos en lágrimas, porque el rebaño de Jehová fue hecho cautivo." (Jeremías 13:15-17).

¿Habías pensado en alguna ocasión que el alma del Señor llora por ti, que sus ojos se deshacen en lágrimas cuando vives para ti y no para él, cuando no le das la gloria?. 

Este texto me impactó enormemente, lo he compartido con vosotros porque creo que Dios tiene propósito de bien para sus hijos, el destino de nuestro futuro está en el Señor, siempre que sigamos sus pautas y no las nuestras. Recuerda :no se trata de Ti, se trata de Él.
Oro por ti que el Señor te ilumine para que siempre marques diferencia con tu vida, tus actos y tus pensamientos, que hagas al Señor famoso, que le des la alabanza y la honra que merece y vivas  como pueblo suyo que eres.

Pastora Noemí Arteaga.